15 vecinas de la ciudad de Tirúa disfrutaron de un relevante taller gastronómico enfocado en productos locales y saludables.
Las beneficiarias formaron parte del Curso de Cocina Saludable Gastronomía Local y Orgánica, iniciativa enmarcada en el programa Quiero Mi Barrio, del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, y ejecutada con el municipio local. El objetivo era sencillo: fortalecer la familia, la vida comunitaria mediante hábitos sanos y rescatar la riqueza culinaria del pueblo mapuche lafquenche. Todo esto, en 22 horas pedagógicas.
Para armar deliciosas preparaciones, usaron productos ancestrales de su tierra como el cochayuyo, la quinoa, el mote y las papas. Con ellos, cocinaron platos como el quiché de cochayuyo, mousse de quinoa, risotto de mote con salsa verde y ñoquis con salsa de cochayuyo, entre otras tantas propuestas. Creatividad y tradición culinaria, todo en el mismo plato.
Pero salgamos de la cocina como tal. El taller formó un espacio de encuentro, recreación y colaboración. Quienes participaron compartieron sus conocimientos, historias y motivaciones.
Liliam Jara, del barrio Las Dunas, agradeció la oportunidad. “Este taller nos permitió aprender a cocinar productos de nuestro mismo territorio y de una forma más saludable. Nos permitirá generar mejores hábitos para nuestras familias en casa”, mencionó.
José Linco, alcalde de Tirúa, destacó que “como municipio estamos muy contentos de ver cómo nuestras vecinas se organizan y participan activamente en iniciativas que fortalecen la identidad local y promueven hábitos de vida saludables. Este taller de cocina no solo rescata nuestros productos tradicionales, sino que también nos invita a valorar lo que producimos en el territorio”, señaló.
Claudia Toledo, seremi de Vivienda y Urbanismo, enfatizó que “la cocina tiene esa capacidad tan simple y profunda de reunirnos, de reconocernos y de fortalecer lo que somos como comunidad. Este taller demuestra que cuando el barrio se organiza y participa, se construyen hábitos más sanos, pero también vínculos que perduran”.
“Desde el Ministerio de Vivienda y Urbanismo seguiremos apoyando estos espacios que unen identidad, bienestar y vida comunitaria. La recuperación de un barrio también se cocina de a poco, con dedicación y junto a sus vecinas y vecinos”, cerró.

