Desde este 13 de noviembre, la CONAF restringió totalmente las quemas controladas y agrícolas en toda la región del Biobío.
La prohibición será hasta nuevo aviso. Esto, como ha de suponer, va en línea con la prevención de incendios forestales. A medida que se acerca el verano, hay más calor, vientos fuertes y pasto seco. Una pequeña chispa puede desatar una tragedia, y ya lo ha hecho en otros momentos.
Esteban Krause, director regional de CONAF Biobío, enfatizó que “cuando el riesgo de incendios se incrementa, limitar el uso del fuego para quemas controladas es fundamental para proteger a nuestras comunidades y preservar nuestros recursos naturales. No podemos arriesgarnos. La prevención sigue siendo nuestra mejor herramienta frente a este tipo de emergencias que generan daños irreparables”.
Pamela Gatti, seremi de Agricultura, llamó a la ciudadanía a “adoptar buenas prácticas en el manejo de residuos. La colaboración de todas y todos es clave para prevenir incidentes que puedan poner en peligro la integridad de nuestras comunidades y nuestros bosques”.
Si usted es testigo de quemas ilegales, debe denunciar a través de los canales formales para la ocasión, que son Carabineros al 133 y CONAF al 130. Quien sea que realice dichos actos vandálicos mientras haya restricción se enfrenta a multas y cárcel, dependiendo de la gravedad.
Las sanciones monetarias van entre las 11 y 50 UTM, $761.915 hasta $3.463.250. El hotel Las Rejas, en tanto, puede escalar desde presidio menor en su grado medio, que va de los 71 días a 3 años.

